471 redadas contra migrantes en 45 días
- Karla Hernandez
- 4 ago
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Asedio a los barrios latinos
Detenciones masivas en Los Ángeles y condados aledaños, basadas en perfiles raciales, desencadenan una batalla legal que frena las operaciones del Servicio de Inmigración
Durante 45 días, desde el 6 de junio, los barrios latinos del sur de California, especialmente en el valle de San Fernando, vivieron un estado de sitio por las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). Con un promedio de diez detenciones diarias, estas operaciones sembraron pánico entre comunidades hispanas, particularmente mexicanas, hasta que un juez federal declaró ilegal su enfoque basado en perfiles raciales.
Mujeres embarazadas, trabajadores de la construcción, cocineros y jardineros, muchos con residencia o ciudadanía, fueron detenidos por agentes de ICE. La Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (Chirla) documentó 471 redadas, destacando que el 90% de los reportes describían agentes sin uniforme oficial, vestidos con ropa táctica, operando en camionetas.
Panorama City, con un 42% de población hispana, registró 21 operativos, seguida de Pico Rivera (90% hispana) con 18 y Los Ángeles (65% latina) con 15. Estas acciones, según Chirla, respondían a la meta del presidente Donald Trump de detener a 3 mil “bad hombres” diariamente, enfocándose en barrios latinos.
CAMPAÑA DE MIEDO Y DISCRIMINACIÓN
“Las redadas de ICE son una campaña de miedo, terror y discriminación racial. Este mapa revela una verdad inquietante: no son casuales, sino ataques deliberados contra comunidades latinas”, denunció Chirla.
La organización mapeó las detenciones para demostrar que el criterio de ICE se basaba en la raza, el acento al hablar, la presencia en lugares específicos o el tipo de trabajo, prácticas declaradas inconstitucionales.
INTERVENCIÓN JUDICIAL Y FRENO A LAS REDADAS
El 11 de julio, la jueza federal Maame Ewusi-Mensah Frimpong emitió dos órdenes de restricción temporales contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). La primera prohíbe detenciones sin sospecha razonable basada en raza, etnia, idioma, lugar o empleo. La segunda obliga a DHS a garantizar acceso a abogados para los detenidos, incluso en fines de semana.
Estas medidas, respaldadas por la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, y una moción de la ciudad para unirse a la demanda contra DHS, redujeron significativamente las redadas en California.
PRECEDENTE CONTRA LA PERSECUCIÓN
La ciudad de Los Ángeles, junto con otras localidades, se sumó a la demanda B-18 para fortalecer el argumento de discriminación racial en las operaciones de ICE, no solo en California, sino en todo Estados Unidos.
Cientos de migrantes fueron llevados al centro de detención en Los Ángeles sin acceso a representación legal, una práctica que la justicia ahora busca erradicar. La batalla legal continúa, mientras las comunidades latinas exigen el fin de lo que califican como una campaña de terror.
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