Intensifica 4T lucha contra el huachicol

También, contra corrupción en Pemex

Investigación apunta a funcionarios coludidos en red de robo de combustible

MARCOS H. VALERIO

La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo reafirmó este lunes su compromiso inquebrantable con la lucha contra la corrupción al anunciar que la Fiscalía General de la República (FGR) y el Gabinete de Seguridad investigan la posible colusión de funcionarios de Petróleos Mexicanos (Pemex) en una red de robo de combustible desmantelada recientemente.

“No vamos a encubrir a nadie”, sentenció la mandataria, subrayando que su administración actuará con firmeza contra cualquier implicado en estas actividades ilícitas, independientemente de su rango o posición.

El anuncio se dio tras la desarticulación de una poderosa banda criminal dedicada al huachicol, que operaba desde 2015 en al menos cuatro estados del país, extrayendo, resguardando y comercializando combustible robado de ductos de Pemex.

Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum destacó que la investigación busca esclarecer si personal de la empresa estatal facilitó las operaciones de la red, conocida como “Don Checo”. “Si hay alguien de Pemex involucrado en ese delito, se va a proceder”, afirmó con contundencia, enviando un mensaje claro contra la impunidad.

La presidenta reconoció los avances logrados en el combate al huachicol durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, quien redujo significativamente este delito a través de operativos y vigilancia en ductos.

Sin embargo, Sheinbaum señaló que el problema persiste y se ha transformado, volviéndose más profesionalizado. Según datos de la FGR, de enero a mayo de 2025 se registraron tres mil 410 denuncias por robo de combustible, 682 más que en el mismo periodo de 2024, lo que evidencia la magnitud del desafío.

“No hay espacio para el triunfalismo. Es un trabajo diario”, enfatizó la mandataria, destacando que la estrategia actual no solo se centra en los ductos, sino también en desmantelar las redes de distribución, transporte y venta de combustible robado, así como en identificar a quienes operan desde la legalidad simulada, como empresas fachada o cuerpos policiales corruptos.

La investigación en curso, liderada por la FGR y el Gabinete de Seguridad, apunta a desentrañar cualquier complicidad interna en Pemex que haya permitido el funcionamiento de esta red a gran escala.

Ante la pregunta de si una operación de tal envergadura podría sostenerse sin la protección de funcionarios públicos, Sheinbaum fue directa: “Es parte de la investigación.

Estamos combatiendo la colusión desde todos los frentes”. Este enfoque refleja el pilar central de la Cuarta Transformación: erradicar la corrupción que históricamente ha permeado las instituciones mexicanas, un compromiso que Sheinbaum busca consolidar con este caso como ejemplo.

La caída de la red de “Don Checo” marca un hito en la lucha contra el huachicol, pero también pone en el centro del debate la necesidad de limpiar las estructuras internas de Pemex y otras instituciones.

Con la vigilancia reforzada y la promesa de no encubrir a nadie, el gobierno de Sheinbaum envía un mensaje contundente: la corrupción no tiene cabida en la nueva etapa de México, y el combate al huachicol es solo el comienzo de una cruzada más amplia por la transparencia y la justicia